El Club de Golf Retamares, en Madrid, acogerá entre el 5 y el 8 de junio el Reale Challenge de España, la duodécima prueba puntuable del Challenge Tour 2008, Circuito de carácter internacional que año tras año incrementa su importancia e interés.
Patrocinado por la empresa aseguradora Reale Seguros –quien asimismo apoya el Open de España desde 2007–, promovido de forma conjunta por la Real Federación Española de Golf y la Federación de Golf de Madrid y organizado por la empresa Making Golf, el Reale Challenge de España 2008 cuenta con un montante total de premios de 140.000 euros.
Retamares, que presenta un nuevo aspecto después de un invierno de profundas reformas, ha sido sede en los últimos meses de competiciones del más alto nivel, con mención especial, en 2007, para el Open Mahou de Madrid –prueba asimismo perteneciente al Challenge Tour– y el Madrid Ladies Masters, en este caso integrado en el Circuito Europeo Profesional Femenino.
La competición reunirá a 156 jugadores en pos de un título de creciente relevancia que permite acumular puntos en el Ranking del Challenge Tour 2008, cuyos 15 primeros clasificados adquieren el derecho a participar en el Circuito Europeo en la siguiente temporada.
En Retamares estarán presentes 100 jugadores profesionales del PGA European Challenge, 50 profesionales españoles y un máximo de 6 jugadores amateurs.
El torneo se disputará bajo la modalidad “stroke play” (juego por golpes) durante cuatro jornadas de 18 hoyos. Al término del segundo día de competición se establecerá un corte que sólo superarán los 50 primeros y aquellos que se encuentren empatados en el citado puesto 50.
La calidad de sus participantes está fuera de toda duda pues no en vano son muchos los que, tras pasar por esta competición, se han situado entre la elite europea en muy poco tiempo. Recordar que Ignacio Garrido, Francisco Cea, Carlos Suneson, Carlos Rodiles, José Manuel Carriles ó José Manuel Lara, por poner algunos ejemplos significativos, han intervenido en este auténtico banco de pruebas que permite vislumbrar a los aficionados qué jugadores van a brillar con más fuerza en un futuro cercano.